El Consejo General del Instituto Nacional Electoral rechazó sancionar a candidato panista a la gubernatura de Coahuila, Guillermo Anaya Llamas, por el presunto uso de tarjetas bancarias para pagar a sus representantes de casilla el pasado 4 de junio, esto por no encontrar relación entre el PAN y el Sindicato de Trabajadores y Empleados Especializados, Similares y Conexos de la República Mexicana, organización por el cual habrían triangulado dicho pago.
“No se advierten elementos que permitan acreditar un vínculo entre el Partido Acción Nacional con los Comités Ciudadanos en el estado de Coahuila de Zaragoza ni con el Sindicato de Trabajadores y Empleados Especializados, Similares y Conexos de la República Mexicana”, indica el proyecto votado a favor.
Este proyecto es en acatamiento a una sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, luego de que el Partido Revolucionario Institucional presentara un recurso jurídica ante la instancia judicial para que el INE investigara de manera exhaustiva la presunta relación del PAN con el Sindicato, lo cual hubiera sido una falta a la ley electoral por el pago ilegal por medio de tarjetas bancarias.
Cabe destacar que el Tribunal sólo llamó a realizar una investigación exhaustiva, no a sancionar al PAN, por lo que el acatamiento se cumplió.
Este proyecto es independiente del de la fiscalización de Miguel Riquelme, y que de acuerdo a lo presentado por la Comisión de Fiscalización del INE elevaría el rebase de tope de campaña del priista a más de 9%; la votación de este último se dará en las próximas horas.
Por otro lado, el Consejo General ratificó los proyectos sancionatorios que la Comisión de Quejas y Denuncias emitió la semana pasada, por lo que se reiteraron las multas económicas a Televisa, Televimex, Televisión Azteca, Fox y ESPN, con un monto en conjunto de 2.2 millones de pesos por la transmisión de propaganda electoral del Partido Acción Nacional en partidos de futbol.
Se interpusieron otras sanciones: a Televisa y Televimex por su participación en la adquisición indebida de tiempos en televisión, derivado de la difusión de propaganda en vallas electrónicas en un partido de futbol por lo que se impusieron sanciones por 350 mil y 385 mil pesos, respectivamente.