Los priistas en el Senado exigen pagar un bono económico a los profesionales de la salud de todo el país, que no solo exponen su vida y la de su familia, sino que salvan a miles de mexicanos en la lucha contra el coronavirus.
El senador Mario Zamora Gastélum destacó que este apoyo tiene que destinarlo la Secretaría de Hacienda en coordinación con la Secretaría de Salud por los meses que dure la contingencia sanitaria.
Al mismo tiempo, solicita que el Senado de la República reclame a diversas autoridades del gobierno federal, a instrumentar un plan emergente que suspenda el pago de contribuciones a la población y puedan ser diferidas, a fin de disminuir el impacto económico de las familias mexicanas, frente a la pandemia del Covid-19.
Propone a las autoridades federales crear un acuerdo para diferir los pagos de los servicios de agua y luz a partir del mes de abril y hasta junio sin el cobro de intereses y sin afectar el historial crediticio de los usuarios, y por otra parte, emitir un decreto para igualmente diferir el pago de créditos hipotecarios, de vehículos y bancarios hasta por tres meses sin que se generen gastos de cobranza por la suspensión.
Un programa especial que reduzca el impacto a los trabajadores independientes, así como un programa para salvaguardar sus derechos laborales. Que a través de las respectivas instancias gubernamentales (IMSS, ISSSTE, INFONAVIT) se implemente una estrategia que permita cubrir las incapacidades por cuarentena a los trabajadores por el tiempo que sea necesario, y suspendan el pago de cuotas de seguridad social y vivienda del mes de abril al mes de junio para ser diferidos sin recargos.
También que se garantice la disponibilidad de granos y alimentos y se establezca un precio especial de los productos de la canasta básica e implementar un programa de subsidio para los alquileres comerciales de las pequeñas y medianas empresas.
Para que al sector hotelero se le otorgue una ampliación del plazo para la devolución de anticipos o entrega de certificados de servicios, a fin de evitar multas y que se implemente un plan emergente a fin de que hoteles y servicio de transporte (taxis) estén a disposición del sistema de salud para el traslado y aislamiento de personas portadoras o que desarrollen el Covid-19, cuyo costo será asumido por el Gobierno Federal.